Giúdice: “Las mejores vacas siguen siendo las que más duran”

  • enero 6, 2020

(03/Ene/2020) Alejandro Giúdice es parte del activo que tiene el progreso genético lechero en Argentina. Es un gran difusor –siempre con eje en la vaca- de cómo el manejo junto a una genética funcional ayudan fuerte a la sustentabilidad de los sistemas lecheros.

Giúdice quien es asesor genético de razas lecheras de la empresa CIALE-Alta Genetics aportó su visión desde la genética en una jornada escenificada la Lechería El Duraznito en Sacanta, provincia de Córdoba, y en diálogo con TodoAgro comenzó hablando del impacto de la descripción del genoma de la vaca en los programa genéticos: “La genómica hace 10 años que está en vigencia, es el análisis del ADN de los terneros al ingresar a los centros de inseminación donde ese análisis nos demuestra qué va a transmitir ese ternero, que virtudes y que defectos va a trasmitir”.

La genómica permite acelerar el progreso genético en los rodeos. “Es que se acorta el intervalo generacional muchísimo porque no hay que esperar a ver las hijas de los toros para saber cómo transmite el toro, y ya sabemos que todo ese acortamiento del intervalo generacional sumado a la selección genómica ha hecho un avance a nivel mundial espectacular y los resultados están a la vista, son vacas mucho más productivas, duraderas y resistentes a enfermedades, características muy importantes en el tambo”, afirma el experto.

Giúdice puntualiza que lo que siempre se ha usado para dirigir la selección genética es por qué se eliminan las vacas si es por la ubre, por la mastitis, por reproducción, por renguera, “y en base a las causas de rechazo de las vacas, se marca claramente lo que tenemos que mejorar”, indicó.

Agrega que “por supuesto que la fuente fundamental del tambo es la reproducción, ahí también hay muchas pautas genómicas como el DPR que es la fertilidad de las hijas de los toros nuevos y todas esas características hacen a la fertilidad y durabilidad de las vacas”. A los efectos de aprender un poco más de estos indicadores expresados mediantes siglas digamos que el índice DPR (Daughter Pregnancy Rate) o tasa de preñez de las hijas, ofrece información de la capacidad de la vaca en general para tener éxito reproductivo, si hablamos de HCR (Heifer Conception Rate hablamos de tasa de preñez de las vaquillonas y el CCR (Cow Conception Rate) expresa la tasa de preñez de las vacas.

Mirando los rodeos

Alejandro Giúdice es un especialista que tiene un gran recorrido en el mundo Holando, ya que formó parte del equipo de Raúl Mascarenhas, quien potenció a límites impensados a la cabaña La Agraria, fundada en 1912 en la zona de Venado Tuerto.

Desde aquella impronta del Holando Mascarenhas, Giúdice destaca que “en cuanto a la morfología de las vacas, evidentemente las vacas que más duran –si uno observa con detenimiento a los rodeos- son en un 90% todas iguales, y sus características es que son medianas, triangulares con mucha capacidad digestiva para poder transformar el forraje en leche, tienen buena ubre, anchas pero no altas y poder trasladarse fácilmente, aunque estén encerradas en corrales”, apunta Giúdice quien propone desde aquellos tiempos la búsqueda de una vaca funcional, “que pasa desapercibida”, es decir que no genera problemas.

En tiempos de encierre –solo en Córdoba hay más de 500 tambos que tienen sus rodeos encerrados, el experto dijo: “Ya no importa tanto el tamaño, como la vaca encerrada está quieta y tiene la comida ofrecida de manera persistente, el estado corporal tiene que ser óptimo. Es una vaca que tiene que perder poco peso post parto y todo eso en los sistemas encerrados se puede controlar mejor, lo cual genera una rentabilidad interesante para el productor”.

En cuanto a confort animal, Alejandro Giúdice puntualizó que “nos falta mucho, tenemos que mejorar el tema el estrés calórico, y si bien se hace algo, no es suficiente. Hay que pensar en una llovizna y aire con la intensidad adecuada, tiene que haber diferentes formas donde podamos mejorar porque es un problema que persiste a través de las generaciones y la nieta de una vaca que sufrió estrés calórico va a dar menos leche, o sea que se está comprobando que el confort es fundamental, cosa que antiguamente no se le daba importancia”, indicó el profesional metiéndose en aspectos relacionados a lo que se denomina epigenética, es decir el mecanismo por el cual el medio ambiente influye sobre los genes.

Fuente: TodoAgro